La importancia de dar el ultimo adiós a nuestras mascotas.

Es necesario acompañar a la ultima morada a nuestra mascota cuando fallece, esto nos ayuda a aceptar el hecho de que este importante miembro de nuestra familia ha partido, aunque esto genere sentimientos de tristeza, es necesario para poder comenzar a sanar y sobrellevar esta nueva realidad a la que nos enfrentamos.

Si es realmente un miembro de nuestra familia, nos enfrentamos a sobrellevar un proceso similar al que llevamos cuando un humano fallece, como adultos en nuestro hogar debemos de estar atentos a las emociones de los mas pequeños de la casa, ya que una mascota querida se convierte en parte fundamental en el desarrollo emocional de nuestros pequeños.

si tenemos la posibilidad de poder enterrarla en nuestro patio una hermosa manera de recordarlos es plantar un árbol o flor favorita, es una manera de unirnos como familia escogiendo la planta que usaremos, de esta manera no desaparecerá, se convertirá en vida y podremos cuidar aun de ellas.

Llevar a cabo una ceremonia de despedida, puede aliviar mucho el dolor de su perdida, por sencilla que sea, no dejes de decirle adiós, no dejes de sacar los sentimientos que genera en ti, haz una carta, dale las gracias por todo el amor incondicional que te ofreció y por haberte brindado todos esos años de compañía, recuerda pedirle perdón en ese momento, aunque no lo digamos cuando un familiar fallece una parte de nuestra alma desea pedir perdón por cosas que muchas veces nos parecieron absurdas.

No sientas vergüenza si necesitas llorar, recuerda que los sentimientos que no expresamos van llenando nuestro interior de tristeza y eso genera mas dolor y ansiedad, al pasar de los días llena tu vida de sus recuerdos alegres y recuerda que tu tristeza era su tristeza, y que tu alegría era su alegría, así que toma un respiro y vive como lo harías para hacer a tu mascota feliz.

Cuando estés listo y sientas que puedes seguir adelante, adopta, y dale a un callejerito la posibilidad de tener la vida fantástica que tu y familia le dieron a tu mascota que partió, adopta en nombre de ese amor que aun queda en tu corazón.

Recuerda cuando ores, siempre pedirle a Dios por tus mascotas también, no es de locos orar por ellos, es de locos el pensar que el todopoderoso no puede cuidarlos.

Como fundación creemos fielmente que un día todos nos volveremos a encontrar, así que hay que vivir fielmente a como si ellos aun estuvieran aquí.

Desde el escritorio de los mestizos, deseamos que sus gordos vivan mucho y que nunca falte salud en sus vidas.